jueves, 28 de febrero de 2013

Adiós al Papa


La despedida de Benedicto XVI, tanto si se es católico como si no es, sin duda, la noticia del día, y probablemente será la más importante del 2013. 

Yo no soy católico, pero siempre recordaré a Juan Pablo II como una especie de 'estrella del Rock'. Gran parte de su pontificado me pilló en la adolescencia, donde cada vez que visitaba un País en su incombustible Agenda presenciaba en las noticias un despliegue espectacular. 

Juan Pablo II hizo que me interesara no por el Catolicismo en sí, sino por la riquísima y a ratos apasionante (a ratos deleznable) historia de la Iglesia y los diversos personajes que han llevado la Barca de Pedro. También hizo que me interesara por otras religiones y la trascendencia histórica de cada una de ellas y como, a lo largo de los Siglos, el Hombre las ha utilizado, y utiliza, como le viene en gana. 

La noticia de hoy tiene que ser ésta:  la primera renuncia de un Papa desde hace Siglos, con todo lo que ello conlleva. Lo demás que se lee en los medios (que si se va por problemas en la Iglesia, que si tenía demasiados frentes abiertos, que si el Vatileaks...) queda para la opinión de cada uno. 

Yo me quedo con este breve Pontificado donde mi fe sigue donde estaba (básicamente en la Ciencia y aquellas cosas que pueden explicarse), pero donde también he podido presenciar una ardua labor para solucionar la cantidad de problemas de la Iglesia por parte de un hombre tremendamente culto, honesto y (eso sí) con un pasado abierto a debate, sin sectarismos de por medio. 

Adiós señor Ratzinger. Espero que la Iglesia siga avanzando y purgando sus pecados, que no son pocos, y que el resto de religiones, sobre todo las ultraviolentas, sigan caminos similares. 

¿Utópìco? Tal vez, pero hace un año si a cualquiera le preguntan si el Papa iba a dejar el puesto ¿cual sería la respuesta?

domingo, 24 de febrero de 2013

La Crisis, everywhere


La imagen que abre este post corresponde a una noticia de El Mundo titulada 'Condenados al Desahucio'. En ella, de nuevo, observamos las enormes consecuencias Sociales que está trayendo la Crisis, maximizadas en ocasiones por los medios y en ocasiones escondidas y minimizadas... por los medios. 

A estas alturas, lo que antes nos escandalizaba o era motivo de encendidos debates parece cotidiano: desahucios, desempleo, manifestaciones, corrupción; empiezan a formar tarde de nuestro día a día y, como todo lo que se convierte en costumbre, al final corre el riesgo de darte igual. 

Y no hay peor momento para que las cosas nos den lo mismo, que éste. A mi alrededor no solo desayuno noticias malas unas tras otras, sino que prácticamente todos y cada uno de nosotros conocemos a alguien que se encuentra en una situación difícil, que haya tenido que emigrar o que se levante cada mañana con la sensación de que el futuro, como poco, resulta incierto. 

Y las tintas se van cargando cada vez más. En las Redes Sociales se ha instalado el victimismo, el revanchismo o la eterna y nada beneficiosa separación entre los de Derechas y los de Izquierdas, siempre en términos absolutos. El enfrentamiento y la crispación están a la orden del día. 

La Sociedad está tan harta y el País tan corrupto y corrompido, que las opciones políticas e ideológicas que antes nos helarían la sangre comienzan a ocupar el subconsciente de esa mayoría informe capaz de armarla con inimaginables consecuencias al ritmo del manipulador de turno. 

Y ante semejante Panorama ¿qué encontramos? Un Gobierno obsesionado con la Economía e incapaz de trasladar confianza a los Ciudadanos, que se debate entre el continuismo que no haga peligrar el Bipartidismo reinante, sus propios marrones y la cruda realidad; la Oposición mayoritaria del PSOE, mientras tanto, se echa al Monte intentando recuperar el Poder a cualquier precio, aunque para ello tenga que sacrificar a todo el que se le ponga por delante, le vote o no; entre medias, un montón de Partidos minoritarios de todo pelaje. Unos queriendo la regeneración democrática que el País necesita; otros buscando ver por donde la palma España para sacarle todo el Jugo al cadáver. 

Pero hay más: la Justicia, politizada. La Policía y el Ejército, ninguneados; la Corona, en horas bajas e incapaz de dar el golpe en la mesa y asumir las responsabilidades que ha de depurar para reivindicarse con alguna opción de futuro.

¿Y los Medios? La parcialidad se ha instalado de forma generalizada, y cada Periódico, Televisión, Radio etcétera defiende a los suyos. Las pocas que tienen cierta independencia se las ven y se las desean, navegando en aguas turbulentas intentando conservar la cordura que todas las demás parecen haber perdido. 

Y también: Secesionistas que se lo llevan crudo, Contertulios y Contertulias que saltan de mesa en mesa diciendo siempre lo mismo y el continuo encumbramiento de Héroes con pies de barro y Mafosetes que en un País que realmente no sufriera una crisis morrocotuda solo serían objeto de mofa y escarnio.

En fin, lo más granado de la inmundicia se empeña en que los españoles de a pie de cualquier ideología, que quieren lo mejor para su País, no tengan las herramientas necesarias para salir a flote. Algunas cosas están cambiando, sí, y que al menos se hagan las preguntas necesarias me hace pensar que hay luz al final del túnel. 

Es hora de que nos deje de importar si Rajoy ganó o no el Debate sobre el Estado de la Inacción. Es hora de dejar de echarnos la culpa los unos a los otros, intentando justificar lo injustificable. Parece evidente para cualquiera que no se ponga o le pongan la venda en los ojos, que nuestros Gobernantes tienen que cambiar de cabo a rabo la forma que tienen de gobernarnos. 

La Crisis está en todas partes, y seguirá estando allí hasta que apartemos los Árboles que día a día nos enfrentan , y empecemos a ver el Bosque. Todos juntos, con serenidad, argumentos y, desde luego, no bajando al nivel donde los que ostentan el Poder nos quieren.  

O eso, o que nos dé todo igual en lo que nuestro culo esté bien sentado. Pero, cuando dejé de estarlo ¿qué?

martes, 19 de febrero de 2013

¿En qué País vivimos?


¿En qué País vivimos?

El último suicidio por temas económicos se ha producido, ni más ni menos, que con una señora quemándose a lo Bonzo dentro de una Sucursal. Sí, a lo Bonzo, no me lo estoy inventando. 

Aparcando la Demagogia (esto de los desahucios no es cosa de hace un año, por mucho que se empeñen algunos en lo contrario), y pasando de los voceras de la Derecha y la Izquierda, tanto a nivel parlamentario como Tertulianos, Medios, Palmeros, Paniaguados, Lameculos, Sectarios y demás fauna, está claro que España tiene un problema. 

La dación en pago, tal cual, no puede ser una solución, sino un coladero. Pero hemos llegado a un límite donde no podemos tolerar, si queremos sobrevivir como Sociedad, que suicidios o intentos de suicidio de este tipo, no se atajen. No podemos tolerar que la corrupción nos resulte familiar, ni podemos resignarnos día tras día diciendo eso de son todos iguales.   

Nuestra mejor opción futura no puede ser EL MAL MENOR.

¿Cuál es la fórmula? Lo primero, dejarse de gilipolleces. Como muchos otros, estoy harto del y tú más de los Políticos y sus diversos acólitos en todas partes. Mucha palabrería, pocas acciones.

Harto de que muchos medios de uno u otro pelaje utilicen a su antojo situaciones extremas para cargar contra unos u otros (muchas noticias que leo van más allá de la denuncia o la constatación de un hecho, y ni siquiera están movidas por criterio periodístico alguno); harto de que Contertuli@s sectarios hablen y hablen como Cotorras para, al final, enfrentarse por los colores de sus Partidos en un estilo barriobajero que hace que cambie de canal ante semejante despropósito; harto de un Sistema económico dominado por intereses personales y corrupción, que tiene que cambiar buscando el equilibrio, la productividad, la excelencia, la transparencia y el crecimiento de España y los Españoles. 

¿Cuántas personas tienen que suicidarse para establecer unos criterios mínimos y no caer en estupideces como demoler edificios con gente en la calle?; ¿cuántas empresas tienen que cerrar?; ¿cuántos casos de corrupción podemos aguantar?; ¿cuántos recortes asumir mientras vemos cómo otros se llenan la saca con el permiso del Estamento de turno?

Si no supiera de la grandeza de nuestra Historia, diría que vivimos en una Sucursal Bananera en expansión. Y, como Ciudadano cumplidor, no dejaré de denunciar y preguntarme ¿en qué País vivimos?

Porque si la respuesta es: un País corrupto y corruptor, idiota, sectario, aborregado, poblado de héroes con pies de barro, idiotizado por la telebasura, sin aspiraciones, cortoplacista, conformista, egoísta, panfletero, perroflautico e idiota... para mi que vamos listos. 

¿En qué País vivimos? Pues en España, señores. Y no siempre fue así ¿hasta cuándo vamos a permitir hacernos, a diario, esta pregunta?

domingo, 17 de febrero de 2013

A la Infanta, no se la imputa


Por si hubiera poco material al respecto, Diego Torres ha lanzado otra carga a la línea de flotación de la Casa Real demostrando con documentación, al parecer, la implicación de la Infanta Cristina en gran parte del entramado del Caso Noos. 

Por el momento, la Fiscalía no tiene previsto imputar a la Infanta. 

¿Es ésta la igualdad ante la Ley que reza nuestra Constitución? Mil caso similares hemos visto donde, con menos indicios, la Justicia no ha dudado en imputar.

La Casa Real dice esforzarse para acercarse al Pueblo, e intentar dar una imagen de pulcritud y decoro. Pues la mejor forma de hacerlo, probablemente, sea quitarse las manzanas podridas de sus filas, aunque alguna sea de la propia sangre del Rey. 

La pulcritud y la decencia no las da la Cuna. Si la Infanta y su marido se lo han llevado crudo, sería un gesto inequívoco que el Rey interviniera haciendo todo lo que estuviera en su mano para constatar que, de facto, todos somos iguales ante la Ley. 

La inacción del Monarca abre una pregunta incómoda: ¿por qué no hace nada? Muchas son las voces que hablan de la implicación del propio Rey Juan Carlos (entre ellas, Diego Torres), y la sospecha parece haberse instalado para los restos en Palacio. Desde luego, la callada por respuesta de la Corona, no ayuda a despejar dudas, precisamente.  

Si la Infanta no pasa por el Juzgado, tendremos otra prueba más de que aquí solo pagan los que nada tienen. Y así ¿cómo pedirle a la Ciudadanía esfuerzos y comprensión? Con la mía, desde luego, que no cuenten.  

martes, 12 de febrero de 2013

El Papa dimite... los demás no


La dimisión del Papa Benedicto XVI por cansancio (y, según muchos entendidos, su incapacidad de luchar contra la corrupción instaurada en el Vaticano, pasto de las  luchas de poder) e incapacidad de cumplir adecuadamente con su Ministerio, fue la noticia de ayer, y probablemente de los próximos días.

No soy Católico, pero sí me gusta la información, y solo un necio cuestionaría la eminencia intelectual de Ratzinger. Hay bibliografía de sobra que manifiesta que este Papa, como muchos otros, tiene la cabeza muy bien amueblada y, además, sentido de la responsabilidad.

En el otro lado de la balanza, y por poner solo un ejemplo reciente, tenemos a Alicia Sánchez-Camacho. Y no es un ejemplo de rivalidad intelectual claro (desconozco la de la líder del PPC), sino de cómo unos dimiten cuando ya no pueden ejercer su cargo con normalidad y otros (Políticos o Lameculos de éstos, generalmente), no lo hacen ni con brea, dándoles igual que les pillen con las manos en la Masa espiando, robando, ocultando información o permitiendo actos presuntamente delictivos, aunque no sean partícipes de los mismos.

A partir de ahí, cada uno criticará lo que crea conveniente, en base a sus creencias, sus sectarismos propios o el intento sincero por ser fiel a la información veraz, o tan veraz como puede ser en estos tiempos de medios presos de unos u otros y, generalmente, parciales hasta decir basta. 

El Papa ha hecho lo que tenía que hacer, pero todos los demás que ya deberían haber dimitido y puesto sus cargos sobre la mesa, aparte de enfrentarse de una vez a la Ley que manejan a su antojo ¿cuándo tendrán un arrebato de coherencia, pulcritud y, en definitiva, responsabilidad?

Para cuando eso ocurra, probablemente hayan dimitido tres Papas más.

jueves, 7 de febrero de 2013

Hasta el gorro


Se acabó la Diplomacia. 

¿Por qué? Porque cada vez resulta más evidente que la inmensa mayoría de los Políticos, Monarquía, Altos Cargos, Sindicatos etc  les da exactamente igual el destino de España y los Españoles, siempre y cuando ellos sigan manteniendo todos sus privilegios. 

Desde hace años, todas las mañanas nos enteramos de nuevos chanchullos, nuevos privilegios inclasificables, nuevas protecciones de unos y otros. Los Eurócratas con sus privilegios desorbitados;  Urdangarín no paga y encima alega empobrecimiento injusto; Ana Mato no dimite, ni la hacen dimitir; cada día, algo nuevo de los Ere;  el PSOE echa los perros a la calle y el PP se explica tarde y desde luego mal. Nadie en las Altas Esferas entona el mea culpa e intenta, de una vez, sacarnos de la Crisis y buscar la regeneración, que ya toca. 

La pelota siempre se queda en el tejado de los Ciudadanos y Ciudadanas. Y para jugar solo tenemos nuestro voto, que cada uno culmina de la forma que mejor sabe o cree, pero siempre pensando (salvo los Sectari@s y paniaguad@s, que siempre serán esclavos) en que buscarán lo mejor para España o (peor) serán el menor de los males. 

Me da igual que Esperanza Aguirre ahora se erija en salvadora de la regeneración por sus propios y oscuros motivos (o no). Al menos ha puesto el tema sobre la mesa con claridad. Un tema que debemos perseguir. 

No hablo de Dimisiones. ¿De qué me sirve que dimita Rajoy para que entre Rubalcaba en coalición con CIU o la Izquierda abyecta de Cayo Lara? El PSOE debería ser condenado al ostracismo perpetuo hasta que no cambie de caras, y el PP, si no hace lo que tiene que hacer como tiene que hacerlo,  ídem. 

Rajoy tiene ahora la oportunidad de dar un giro total  a los últimos meses, tirando de programa y sacando TODA la basura. Si no lo hace, será un signo más de debilidad y esclavitud. 

No podemos continuar así. Esta Clase Política acomodada y endogámica solo nos hundirá cada vez más, hasta que ya no quede nada que salvar. 

Contra la Corrupción, limpieza y rigor. Contra la Crisis de valores e ideas, educación y transparencia. Hay que perseguir el cambio del actual sistema, o nos hundiremos con el. Y el Rescate será el menor de nuestros problemas. 

Se acabó la Diplomacia ¡si no cambian, les cambiarán... Coño!

domingo, 3 de febrero de 2013

Con esta Casta al timón, naufragamos


Claramente insuficientes. 

Así me han resultado las explicaciones de Mariano Rajoy sobre los presuntos pagos en negro a la cúpula del PP por parte de Bárcenas. 

Si los grafólogos dicen que la letra es de Bárcenas, pero que la información está manipulada, evidentemente no se puede negar la evidencia cerrando filas y poniendo la mano en el fuego por una cúpula completa donde, además, incluso Pío García Escudero ha reconocido que algo de cierto hay. 

El PP sigue empeñado en desperdiciar la información, y en hacer las cosas de la peor manera posible. Si lo publicado por el País es falso, que lo destruyan mediáticamente; si tiene tintes de verdad, que lo expliquen como Dios manda, desmontando las tesis del contrario,  no con frases solemnes que de nada sirven cuando la Ciudadanía está al límite y la corrupción ya es uno de los primeros problemas de los Españoles. El Discurso de Rajoy en el actual clima solo echa más leña al fuego, y desde luego se le puede tildar de solemne en la misma medida que de irresponsable. 

Así, el PP se desploma en las Encuestas, destrozando toda la ventaja conseguida a fuerza de desoír a su Electorado y meter una y otra vez la pata, bien saltándose a la torera su programa, bien realizando acciones previamente condenadas que nada tienen que ver con los dictámenes de Merkel o Bruselas (imperdonable su 'gestión' en materia de Terrorismo, o el compadreo con la Banca). 


Por si esto fuera poco, el PSOE de Rubalcaba no ha tardado en hacer lo que mejor se le da: beneficiarse a sí mismos, movilizando a su electorado más cerril y a todos los que son capaces de reventar la vida pública. De nuevo observamos el sitio a las sedes del PP (nunca a las Sedes del PSOE, y será por casos de corrupción), para después (como no), pedir la Dimisión de Rajoy con unos argumentos que son un ensayo de mayúsculo cinismo con todas las letras y un único propósito: YO, MI, ME, CONMIGO. 

Que la parte de la Casta del lado del PP tiene mucho que explicar, está claro (y aún no lo ha hecho, ni de lejos); pero que el PSOE (con todos sus casos de corrupción campando a sus anchas, 8 años de hundimiento de España a sus espaldas en la nefasta era Zapatero, y una historia con tantos casos turbios que parece una película de Mafiosos) se ponga a dar lecciones a través del personaje más siniestro de la vida política, clama al cielo. 

Algún tonto o Sectario se creerá su discurso, pero espero que (tal y como indican las encuestas), el desplome del PP no le sirva de nada al PSOE y, por fin, otras opciones de Gobierno sean posibles. 

Los dos grandes Partidos que llevan 30 años chupando del bote, turnándose y perpetuándose, engordando y practicando la endogamia, están acabados. Con esta Casta al timón, naufragaremos seguro, pues nos torpedean de todos lados y al Capitán y Grumetes les importa poco que se hunda el Barco. 

Nos torpedea la Crisis económica, la Corrupción, los Nacionalismos, la Politización de todos los Estamentos y la enorme brecha en los valores e ideas del País y sus gentes, que está dando al traste con toda nuestra historia, y poniendo en peligro el futuro de un País de potencial y recorrido incuestionable. 

Pues no, señor Rajoy, me debe muchas explicaciones y tiene mucho que limpiar. 

Y señor Rubalcaba, usted mejor cállese y deje de insultar inteligencias.