La aprobación de la reforma de los Convenios gracias a la abstención (pactada) de CIU y PNV,pone una vez más de manifiesto lo poco que le importan a los nacionalistas radicales y moderados el destino de España.Si no tenemos ya bastante con el sectarismo imbécil del PSOE, siempre andarán por ahí esos partidos pequeños que, sin embargo,tienen los suficientes escaños como para decidir los destinos del País.
Y ¿cómo lo hacen?. Haciendo del chantaje un arte.
Y si tu interlocutor tiene aún menos escrúpulos ( ya que su único pensamiento es agotar la legislatura aunque para ello se cargue España tal y como la conocemos,siempre y cuando conserve el número máximo de poltronas donde los orondos parlamentarios puedan acomodar sus posaderas) estos buitres tienen la comida muy, pero que muy bien servida.
Puedo entender que cada persona tenga cierto sentimiento de pertenencia a la Comunidad en la que reside, y entiendo casi cualquier ideología que pueda sostenerse con argumentos sólidos, aunque no la comparta.Pero el atraco, la jeta, el caso omiso hacia la ciudadanía, me resulta repugnante.
Os mandaría la mierda si no supiera con certeza que, moral y físicamente, estáis empapados de ella.
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